viernes, 24 de febrero de 2012
vivo en un mar
El océano tiene mente , y tiene brazos y tiene mil formas. El océano nos rodea y comparte con nosotros día a día. A veces llamamos amigo a el océano que nos rodea, jugamos con el, compartimos , comentamos, hablamos y juramos amistad eterna, juramos sinceridad, en nuestras muñecas descubiertas amarramos pulseras donde dice que tenemos un amigo y que este será por siempre, estamos bombardeados día y noche por este océano desgarrador que nos lleva de lado en lado. Conocíamos el mar, y lo conocíamos muy muy bien, nos parecía hermoso y alegre y por sobre todo, el mar nos parecía eterno y confiábamos en el, en su marea y en su ritmo. Hoy no sabemos nada acerca del mar, esta tan lejos y sin color que nos parece que nunca hubiera sido el tiempo en el que llevábamos pulseras y hacíamos cartas para ellos. De a poco descubrimos que ese mar que conocíamos estaba ahí , seguía con su forma, seguía a su modo y seguía, pero pasaba al lado nuestro, rozaba nuestros brazos sin detenerse, sin vernos y sin conocernos, así es , nadamos en un mar que no nos conoce. No conoce nada de nosotros. No conoce nuestras respuestas, como reaccionaremos, que haremos, que queremos , quienes somos. Odio este mar , odio su egoísmo, odio su falta de empata y por sobre todo odio sentir que este mar en el que tanto he trabajado y en el que tanto tiempo he estado, no es mi mar.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario